Joseph Mouannes, “Uso político de la religión en algunos países islámicos”, Avvenire, 24.IX.01

FRIBURGO (SUIZA), 24.IX.01. El padre Joseph Mouannes, teólogo y antropólogo libanés, rector de la Universidad Católica de Kaslik, la segunda del país, se muestra crítico con el uso político de la religión que se ha dado en muchos países islámicos.

Tras los atentados contra Estados Unidos, el experto en cuestiones de Oriente Medio hace en esta entrevista un llamamiento a todos los líderes políticos y religiosos musulmanes a condenar las escuelas coránicas que enseñan el terrorismo.

–¿Cuál es la reacción a esta crisis internacional en el Líbano? –Joseph Mouannes: Existe una difundida condena de la ideología religiosa que justifica la violencia y que se vuelve contra el mismo Islam. Existe, de hecho, un Islam tolerante, desarmado, que comparte con nosotros cristianos el respeto a la vida, la ley, los derechos humanos. Quien ha atentado contra Estados Unidos ha atacado también a este Islam, promoviendo el terrorismo al nivel de una especie de teología sagrada.

Esto es inmoral, injustificable. Se quiere hacer precipitar Oriente Medio en una situación de miedo, como si no hubiera bastado la violencia entre israelíes y palestinos. La violencia es obra de pequeños grupos, pero a la larga acaba por contagiar al pueblo a través de la interpretación distorsionada de los textos religiosos. Sin embargo, no se elimina con más violencia, sino con el derecho, la tolerancia y el amor.

–¿Ha habido entre los musulmanes «moderados» demasiada indulgencia hacia el fanatismo? –Joseph Mouannes: El problema no está en la masa, sino en los intelectuales y líderes religiosos que interpretan los textos sagrados. Los intelectuales islámicos saben lo que es el integrismo, y si quieren saben también cómo ponerle freno. Los líderes religiosos, a su vez, conocen el modo de detener o empujar a la gente en ese camino. También ellos son responsables de lo que ha sucedido. Ahora deben condenar las escuelas coránicas en las que se justifica el terrorismo y se enseña a atentar contra mujeres y niños.

–¿Cuál es la estrategia que ha tolerado al extremismo? –Joseph Mouannes: No hay ninguna estrategia, son los políticos los que han permitido el avance de los fanáticos. En Egipto, en Siria, en Jordania, en Irak, los regímenes están contra el extremismo. Pero una cosa es vigilar a las fuerzas más radicales y otra declarar públicamente que esta forma de interpretación del Corán es inaceptable, no sólo dentro del país. Esto no lo dicen: tienen miedo la reacción de la gente. Y la masa tiene el corazón sensible al fundamentalismo incendiario. Ahora bien, muchos países islámicos tienen miedo del fanatismo religioso, al menos en su territorio y no permitirán que se extienda.

–Tras lo que ha sucedido, el Islam de los kamikazes lo tendrá difícil…

–Joseph Mouannes: Sí, la oleada de desprecio en todo el mundo no quedará sin consecuencias. Recordemos sin embargo que Osama Bin Laden nació como aliado de Occidente, que lo usó contra la Unión Soviética, y ahora se ha convertido en su enemigo mortal. La misma cosa sucedió con Jomeini, primero albergado por Francia y luego transformado en enemigo público. A veces se da de comer al diablo en casa. Hay que tener mucho cuidado a la hora de usar la religión como arma política para luego darse cuenta que te apunta con la pistola.

–¿Qué consecuencias tendrá para el mundo islámico él que se considere como autores del atentado a musulmanes? –Joseph Mouannes: Muy serias. Moralmente, la imagen de los musulmanes sale oscurecida. Las restricciones por motivos de seguridad afectarán sobre todo a los jóvenes de los países árabes, a los que se les niegan los visados para salir al extranjero. De este modo se aumentará la frustración, en lugar de garantizar la seguridad.

–¿Hay todavía espacio para el diálogo con el Islam? –Joseph Mouannes: Si, a condición de que se logre el respeto y que no se hagan concesiones en materia de derechos y libertades, así como en nuestra concepción de Dios. No podemos deslucir nuestra fe en el Dios trinitario por el hecho de que ellos no crean en él. Tampoco podemos aceptar el que la ley islámica se anteponga a la civil.

–¿Hay responsabilidades del mundo occidental en la génesis de esta crisis? –Joseph Mouannes: Occidente debe sentirse culpable de dos errores: por una parte no ha comprendido la historia y la realidad del mundo árabe, basando sus juicios en análisis equivocados; por otra parte, se ha mostrado tolerante, debido a intereses políticos y económicos, con regímenes que no respetan los derechos humanos, la libertad religiosa, la igualdad entre los hombres. Con estos errores no se llegará nunca a la paz.

Joseph Mouannes, Avvenire, 24.IX.01 Tomado de www.zenit.org – www.avvenire.it